Las religiosas de la congregación de las Terciarias Capuchinas de la Sagrada Familia cierran su casa de Valencia después de 132 años Celebran una misa de acción de gracias en la parroquia de los Santos Juanes

Las religiosas de la congregación de las Terciarias Capuchinas de la Sagrada Familia cierran su casa de Valencia después de 132 años Celebran una misa de acción de gracias en la parroquia de los Santos Juanes

Las religiosas de la congregación de las Terciarias Capuchinas de la Sagrada Familia cierran la casa de Valencia después de 132 años de presencia en la ciudad y por ello celebraron una misa de acción de gracias en la parroquia de los Santos Juanes.

La eucaristía de acción de gracias fue presidida por el párroco, Gonzalo Albero, y concelebrada por los sacerdotes de la parroquia y el presidente de CONFER Diocesana, el sacerdote carmelita José Carlos Gimeno, según han indicado las religiosas.

Junto con la superiora provincial, Inmaculada Sancho, participaron hermanas de las comunidades del Santuario de Nuestra Señora de Montiel-Benaguacil, Massamagrell, Meliana y Madrid; la presidenta de CONFER COVAL, María Dolores Sempere; feligreses de la parroquia, familiares, amigos y representación de otras familias religiosas.

En la misma celebración, Ana María García Giner celebró sus bodas de oro de profesión religiosa, por lo que ofreció testimonio de su experiencia vocacional. Las hermanas de la actual comunidad que cierra sus puertas, María Desamparados Alejos, Ana María García, Josefa Cámara, Claudina Blanco y María Domitila García, recibieron el reconocimiento y gratitud de la parroquia y de los presentes.

Al inicio de la misa, la superiora de la comunidad realizó un recorrido histórico por la presencia de las Terciarias Capuchinas en la ciudad de Valencia. Así, destacó que la casa de Valencia se abrió en 1890, justo a los cinco años de haber sido fundada la Congregación por fray Luis de Massamagrell, futuro obispo Luis Amigó, en el Santuario de Nuestra Señora de Montiel, en Benaguacil.

La finalidad de la nueva casa era hospedar a las hermanas de los pueblos vecinos que necesitasen ir a la capital por motivos de salud o solucionar asuntos propios de sus comunidades. La casa estuvo, sucesivamente, en las calles Tapinería, Samaniego y Concordia, en la zona de Ciutat Vella, camino del “trenet” de Pont de Fusta.

Fue en 1930 cuando las hermanas llegaron a la calle Eixarchs número 9. Ahí se abrió el Colegio “Jesús, José y María” (1941-1973) y ahí tuvo su sede la Curia de la Provincia “Sagrada Familia” (1979-2014) al tiempo que se dio acogida a jóvenes procedentes de la Colonia San Vicente Ferrer (el “Reformatorio”) para completar su formación académica o facilitar su vida laboral (1979-1985).

Al unirse las provincias religiosas de Europa en una única demarcación, la Provincia Nazaret, con sede actual en Madrid, la casa de Valencia siguió desempeñando la ininterrumpida misión de la hospitalidad y la colaboración con la Real Parroquia de los Santos Juanes, junto a otras tareas de voluntariado y de presencia en otros organismos diocesanos.