El Colegio Santiago Apóstol del Cabañal forma a docentes y alumnos mediante un reconocido proyecto internacional que promueve la inclusión social a través del arte Especialistas de la compañía italiana “Segni Mossi” ofrecerán esta semana varios talleres

El Colegio Santiago Apóstol del Cabañal forma a docentes y alumnos mediante un reconocido proyecto internacional que promueve la inclusión social a través del arte Especialistas de la compañía italiana “Segni Mossi” ofrecerán esta semana varios talleres

El Colegio Parroquial Diocesano Santiago Apóstol del Cabañal , al que acuden alumnos de familias sin recursos -en su gran mayoría pertenecientes al pueblo gitano-, acogerá esta semana varios talleres para docentes y alumnos impartidos por especialistas del reconocido proyecto internacional “Segni Mossi”, que promueve la inclusión social, la creatividad, la socialización y la confianza, entre otros valores, a través del arte, relacionando danza y dibujo.

Las sesiones formativas se han realizado este lunes, para el profesorado, en el Colegio y, hoy y el miércoles, de 9 a 12.30 horas, con los alumnos y los profesores conjuntamente.

Actualmente, el colegio diocesano desarrolla el proyecto de “comunidades de aprendizaje, para poner en práctica los principios del aprendizaje dialógico a través de actuaciones educativas de éxito, cuyo origen está en la investigación educativa europea INCLUD-ED, donde la gran mayoría del alumnado se encuentra en situación de desventaja socioeconómica”, según explican desde el centro.

“Segni mossi” es un proyecto de investigación creado en 2014 por el artista visual Alessandro Lumare y la coreógrafa Simona Lobefaro con el fin de investigar la interacción entre danza y signo gráfico con niños y adultos. Desde 2015 han estado realizando cursos de capacitación y talleres en más de 20 países y fue seleccionado como uno de los cien proyectos educativos más innovadores en todo el mundo para los años 2017 y 2019.

Entre los objetivos de este proyecto, a través del movimiento y el arte, destaca “facilitar la conciencia de nuestro cuerpo y estimular el potencial motor y creativo, explorar la conexión entre las cualidades expresivas de los movimientos del cuerpo y las cualidades expresivas del trazo, considerar la experimentación como un método de trabajo, ganar confianza en uno mismo y en los demás, y desarrollar la relación con el grupo y la socialización respetando y destacando el valor de las diferencias existentes entre cada individuo”.