La Insigne Colegiata de Gandia ha restaurado los contrafuertes recayentes a la Puerta de Santa María Se estaban deteriorando por filtraciones de agua tras las obras realizadas en el 2010

La Insigne Colegiata de Gandia ha restaurado los contrafuertes recayentes a la Puerta de Santa María Se estaban deteriorando por filtraciones de agua tras las obras realizadas en el 2010

La Insigne Colegiata de Gandia ha restaurado los contrafuertes recayentes a la Puerta de Santa María. Lo ha hecho a través de la Fundación de la Comunidad Valenciana para la Restauración de la Colegiata, con un presupuesto de 36.875,08€, de los cuales 18.437,54€ han sido concedidos por una subvención de la Conselleria de Cultura, Educación y Deporte para el patrimonio inmueble y la otra mitad ha sido sufragada por la Fundación. Esta subvención ha sido la propia Fundación quien ha adelantado el dinero sin recibir todavía hoy lo aprobado por la Conselleria.

Según el arquitecto designado por la Fundación para la Restauración de la Colegiata de Gandia, Javier Roche, “el desprendimiento de mortero de rejuntado en los sillares se estaba produciendo por la presión del agua en el interior.” Las juntas y los canales de agua mostraban grandes grietas y agujeros, a la par que se había recogido material de excremento de palomas y también residuos que los obreros habían dejado en uno de los recayentes al desmontar los andamios de la anterior restauración, así cómo plásticos y otros materiales, que, en su día, no fueron retirados. Esto contribuyó como parada para la acumulación de todos estos objetos que impedían el desagüe.

En varias ocasiones la Colegiata había denunciado el mal acabado de las obras, de hecho, en cuatro ocasiones tuvo que cerrarse la Puerta de Santa María por diversos desprendimientos a la vía pública recayente a la Plaza Mayor. Al retirar escombros en esta restauración, piedras más grandes que un pie estaban a punto de desprenderse y, menos mal, que, tras tres peticiones de esta subvención, la Conselleria se dignó concederla. No obstante, la Colegiata de Gandia recuerda que, a pesar de haber sido restaurada, ha sido la propia Fundación la que ha tenido que hacer frente a los gastos de una obra con deficiencias.

Según Roche, los desprendimientos son por las filtraciones de agua, pero al haber analizado el material empleado, “han dado como resultado una elevada resistencia a la compresión, superior a la exigida para este tipo de morteros, y un alto contenido de cemento para este tipo de aplicaciones”, también por un “deficiente amasado”. Lo que para la Colegiata hace pensar que presuntamente se había carecido de la adecuada inspección técnica en la realización de las obras.