Mons. Benavent preside, por primera vez, como Arzobispo de Valencia la festividad de San Vicente Ferrer, dedicada al Centenario de la Coronación de la Virgen En la Catedral, misa de pontifical en honor al patrón de la Comunidad Valenciana

Mons. Benavent preside, por primera vez, como Arzobispo de Valencia la festividad de San Vicente Ferrer, dedicada al Centenario de la Coronación de la Virgen En la Catedral, misa de pontifical en honor al patrón de la Comunidad Valenciana

– El religioso Vicent Grau i Monrós predica un sermón en valenciano en el que destaca la gran devoción de Sant Vicent por la Mare de Déu y las similitudes del santo con el padre Jofré

– “Enguany, el P. Jofré i Sant Vicent Ferrer tornen a juntar-se en la seua missió comú: predicar l’Evangeli i, hui, a través de les obres de caritat, que continuen vives”

FOTOS V. Gutiérrez/AVAN

La Catedral de Valencia ha acogido esta mañana la celebración de la misa de pontifical en honor a San Vicente Ferrer, presidida por primera vez por monseñor Enrique Benavent como Arzobispo de Valencia, que ha estado dedicada este año al Centenario de la Coronación de la Virgen de los Desamparados.

Monseñor Benavent ha asegurado que “el nostre patró ens uneix i germana a tots els valencians” y ha pedido que San Vicente Ferrer nos bendiga, proteja y nos confirme a todos en su paz: «Que Crist que ha manifestat a Sant Vicent la força renovadora del Misteri Pascual us faça autèntics testimonis del seu Evangeli i que el seu exemple de caritat ens faça capaces de crear una vertadera comunitat de fe i amor”.

El Arzobispo de Valencia ha agradecido – en este día dedicado al patrón de la Comunidad Valenciana- la participación de los valencianos, de las autoridades y representantes de las asociaciones vicentinas, así como la predicación este año a cargo del religioso dominico Vicent Grau i Monrós, quien ha pronunciado el sermón en valenciano, siguiendo la tradición basada en las predicaciones del santo valenciano, perteneciente a la misma orden.

Vicent Grau i Monrós, de la comunidad de San Vicente Ferrer de Valencia, ha centrado su sermón en la predicación de San Vicente Ferrer en relación a la Mare de Déu para demostrar la gran devoción que le tenía y ha señalado las grandes similitudes entre el padre Joan Gilabert Jofré, impulsor la devoción a la Virgen de los Desamparados, y el santo dominico valenciano.

Según ha señalado, “el nostre Sant començava els seus sermons amb la proclamació d’una frase de la Sagrada Escriptura en la que anava a basar el sermó, i, a continuació, saludava a la Mare amb un “Ave Maria”.

Así, «començar amb esta pregària ja diu molt de la devoció a la Mare de Déu que tenia el Sant”, según Vicent Grau que asegura que, por ello, “es diu que va ser Vicent Ferrer qui va iniciar el costum de saludar a María al principi del sermó”.

Y no solamente, el santo “prega a Maria per devoció, sinó perquè li ajude a poder explicar bé el tema del sermó que li pareix difícil i misterios, i perquè l’entenguen bé els fidels i el puguen cumplir”.

San Vicente Ferrer y Padre Jofré, dos grandes predicadores y evangelizadores

FOTOS V. Gutiérrez/AVAN

Según el religioso Vicent Grau i Monrós, San Vicente predicaba también en las fiestas de la Mare de Déu y ha recordado el origen de la imagen y devoción a la Virgen de los Desamparados, – en la figura del padre Joan Gilabert Jofré-, con quien San Vicente Ferrer tiene “moltes semblances” que Vicent Grau se ha preguntado si son coincidencias o providencia.

Así, San Vicente Ferrer y el padre Jofré nacieron los dos en Valencia en 1350; los dos tenían cerca de su casa un convento: el primero de mercedarios y el segundo de dominicos; los dos fundaron en 1410 dos obras de caridad de renombre y las primeras de Europa, nacidas de su intensa caridad con los necesitados, obras que hoy siguen vigentes: “El P. Jofré, el primer hospital de folls i, Sant Vicent, el primer col.legi d’orfens”. «L’obra que inicià el P. Jofré encara està present en les obres de caritat de la Confraria de la Mare de Déu dels Desamparats”, ha añadido.

Igualmente, los dos fueron grandes predicadores y evangelizadores, compartieron dos etapas de predicación: del 1410 al 1413 por Valencia, Italia, Murcia y Castilla. Y tres años más tarde volvieron a salir juntos a predicar por Francia. Por tanto, “no hi ha dubte: tenien molt en comú. Diria més: eren amics”. “Hem de pensar que l’amistat i coincidència en el temps dels dos valencians i les seues obres de caritat, és per major glòria de Déu”, ha asegurado.

San Vicente Ferrer no conoció la advocación de Madre de los Desamparados, posterior a su muerte, y tampoco buscaba en sus predicaciones dar clases de Teología o de Mariología sino suscitar la devoción y penitencia, y como recuerda el dominico “Sant Vicent és un predicador que posseeix una extraordinària habilitat per a fer aparéixer a la Verge en els seus discursos”.

El padre Jofré y San Vicente Ferrer vuelven a juntarse este año en su misión común: predicar el Evangelio y a través de sus obras de caridad que continúan vivas

También refuerza la devoción del santo a la Virgen y la vinculación de San Vicente con el Padre Jofré, el hecho de que de la misma manera que el padre Jofré quiso que el Hospital estuviera bajo el patronazgo de la Virgen María, también San Vicente puso a la Mare de Déu como protectora del Colegio de Huérfanos que fundó.

“Enguany, centenari de la coronació de la Mare de Déu dels Desamparats, el P. Jofré i Sant Vicent Ferrer tornen a juntar-se en la seua missió comú: predicar l’evangeli; hui a través de les obres de caritat del Col.legi d’orfens i de la Confraria de la Mare de Déu. Donem gràcies al Senyor per les persones que col.laboren d’una manera o altra a que continuen vives les seues obres”, ha concluido el religioso Vicent Grau i Monrós.

Ofrenda de flores y procesión vespertina

Dentro de los actos en honor a San Vicente Ferrer, esta mañana también se ha celebrado la procesión cívica desde el Ayuntamiento de Valencia hasta la casa natal del santo con ofrenda de flores.

Y esta tarde,  a las 19 horas, comenzará la solemne procesión general, con el itinerario habitual realizando estaciones en los lugares vinculados al santo dominico como es su casa natal, la iglesia de Santo Domingo y la parroquia de San Esteban, donde está su pila bautismal.