“Debemos intentar que el Año Jubilar del Santo Cáliz vaya adquiriendo dimensión universal” III Congreso Internacional sobre el Santo Cáliz

“Debemos intentar que el Año Jubilar del Santo Cáliz vaya adquiriendo dimensión universal” III Congreso Internacional sobre el Santo Cáliz

(Delegación Medios Comunicación Arzobispado de Valencia/V.Gutiérrez)

Acabamos de iniciar el III Año Jubilar del Santo Cáliz, que en realidad es casi el segundo. El primero fue el año de institución del Año Jubilar, el segundo coincidió con tiempo de pandemia y este tercero tiene que ser un año de consolidación y de difusión de lo que significa la celebración de un Año Jubilar.

Entre todos debemos intentar que esta consolidación y esta difusión del Año Jubilar, que se celebrará perpetuamente, vaya trascendiendo poco a poco los límites de la ciudad, los de la diócesis, y vaya adquiriendo cada vez más, una dimensión universal. Y para eso, me alegro de todas las iniciativas que se están tomando desde distintas instituciones de la sociedad valenciana.

El Santo Cáliz es una pieza que suscita un gran interés. El mismo interés que suscitan otros lugares insignes y sacros de la cristiandad. ¿Quién no ha ido alguna vez a Santiago de Compostela?. ¿Quién no ha ido alguna vez a Turín y ha visitado la Catedral de Turín con la Sabana Santa?. ¿O quién no ha ido a Jerusalén y ha visitado la Basílica del Santo Sepulcro? ¿O a Roma y ha visitado el Sepulcro de San Pedro?. Son los lugares por excelencia que atraen,que despiertan el interés de los creyentes e incluso de no creyentes en estos lugares sagrados. Porque son lugares que conservan recuerdos, testimonios de momentos fundamentales de la historia del cristianismo, de la historia de la fe.

Por eso, me parece que estos congresos son muy importantes para la difusión, pero sobre todo para la consolidación de la celebración de este Año Jubilar. Porque muchas veces en el imaginario colectivo estos lugares son considerados como lugares de leyenda. En el fondo, cuando uno habla de la Sabana Santa de Turín, cuántas veces se ha cuestionado su autenticidad, incluso la autenticidad del del Sepulcro de San Pedro, con las obras de Margarita Guarducci sobre las excavaciones que se hicieron en el subsuelo de la Basílica de San Pedro, o las excavaciones que hay en el subsuelo de la Catedral de Santiago de Compostela.

De alguna manera, estos congresos nos ayudan a ver que la fe no es una leyenda, sino que se sustenta en una verdad, en una realidad. El Santo Sepulcro, la Sabana Santa, el Santo Cáliz, no es simplemente una leyenda que expresa un deseo que hay en el corazón del hombre de aferrarse a objetos sagrados, sino que hay un fundamento real. Pienso que una fe que no se sustente en un fundamento real, en una posibilidad real al menos, de que eso que se venera tiene un fundamento histórico, eso sería una fe vacía. Por eso estas iniciativas me parecen de lo más importante, porque aquí siempre jugamos entre leyenda y realidad, entre tradición e historia. Sobre el Santo Cáliz hay muchas tradiciones, pero también hay datos históricos. No es solo tradiciones, sino que en el fondo se ve como los datos históricos, los datos arqueológicos, van confirmando todas estas tradiciones.

Y por eso, para que se vea que la fe cristiana tiene una base, no está en contradicción ni con la cultura ni con la razón, ni que la tradición contradice la historia, ni que el deseo siempre inherente en el corazón del hombre de encontrar los elementos sagrados que son fundamentales en la historia de su religión, no se contradice con la realidad posible, eso es también no solo beneficioso para la historia, sino también para la misma fe.

Estos lugares, estos objetos, siempre permanecen algo en el misterio. No se podrán en el fondo explicar racionalmente de una manera absoluta, porque es algo que forma parte de la estructura de la fe también, pues su racionalidad o su racionabilidad y el carácter de misterio siempre permanece como misterio. Este congreso es también una manera de acercarse al misterio para mostrar que ese misterio no es una invención humana, no es una fantasía, no es la proyección de un deseo, sino que hay una base que cada vez nos va acercando más al misterio y nos va guiando para que lo comprendamos mejor. Muchas gracias porque de este congreso pueden salir cosas muy interesantes que nos ayuden a consolidar y a difundir este Año Jubilar.



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